miércoles, 23 de julio de 2014

CRÍTICA CSF: ESPLENDOR EN LA HIERBA, de Elia Kazan


ESPLENDOR EN LA HIERBA (SPLENDOR IN THE GRASS), de Elia Kazan
Largometraje nº 38. Cinoscar Summer Festival 2014: Sección oficial a concurso
EE. UU., 1961. Dirección: Elia Kazan Guion: William Inge Duración: 120 min. Género: Drama romántico Fotografía: Boris Kaufman Música: David Amram Reparto: Natalie Wood, Warren Beauty, Pat Hingle, Barbara Loden, Zohra Lampert, Sandy Dennis, Audrey Christie, Gary Lockwood
Elección y presentación de Mariano Silva Hernández: "Aunque mis ojos ya no puedan ver ese puro destello, que en mi juventud me deslumbraba. Aunque ya nada pueda devolver la hora del esplendor en la hierba, de la gloria en las flores, no hay que afligirse. Porque la belleza siempre subsiste en el recuerdo. Bienvenido a la pasión y al despertar de la juventud. Bienvenido a los suaves susurros del “qué dirán” que hacen tambalear los más fuertes cimientos. Bienvenido a una de las mejores actuaciones femeninas que ha dado el cine. Pero sobre todo, bienvenido a una historia de AMOR en mayúsculas".


¿De qué va?: Años 20, zona rural de Kansas. Bud y Dean están enamorados, y aunque sus familias parecen aprobar su relación las distintas presiones estudiantiles, sociales y familiares terminan por separar los destinos de los dos jóvenes. Dean termina perdiendo la cordura, y Bud se deja arrastrar hacia el desencanto. Una historia de cómo el azar, el tiempo, el dinero y las clases sociales son capaces de moldear un romance que continúa hasta los años 30, tras el crack del 29 y con los personajes en su edad adulta, a punto de casarse con sus respectivas parejas.
Palmarés: Óscar al mejor guion original del año 1961 para William Inge, y nominación para Natalie Wood en mejor actriz protagonista. Tres nominaciones a los Globos de oro: mejor película dramática, mejor actor y mejor actriz. Candidatura al Bafta a la mejor película extranjera. Nominación del Directors Guild of America a la mejor dirección para Elia Kazan.



Reseña Xavier: Elia Kazan supo retratar en sus películas una generación de jóvenes a la deriva que lucha por conseguir sus sueños. El amor imposible y las influencias familiares, dos de los ingredientes clave de la literatura romántica, son las bases de clásicos como Un tranvía llamado Deseo, Al este del Edén y La ley del silencio, adaptaciones a la gran pantalla de obras teatrales, periodísticas y literarias, y todas ellas consideradas por la Academia de Hollywood en los años de su estreno. Todos esos ingredientes se repiten en Esplendor en la hierba, film que supuso el salto inmediato al estrellato de Warren Beatty y la confirmación del potencial de Natalie Wood, coincidiendo con el éxito de West Side Story. Esplendor en la hierba arranca como un drama juvenil con poca enjundia, pero poco a poco se va recrudeciendo hasta convertirse en una tragedia clásica con una escena final de una belleza y una tristeza impresionante. Los avatares que unen y separan a los personajes resultan pueriles o complejos según la secuencia, la ñoñería sesentera amenaza en varias ocasiones con naufragar la película y el dibujo homogéneo de los personajes secundarios resulta un tanto obvio (la condescendencia de la madre, la rectitud del padre empresario o el patriarca obsesionado con las noticias sobre las subidas de la Bolsa, aunque son retratos de la moral de la época, también resultan a ojos del espectador moderno directrices un tanto obvias del drama que se desata en el segundo tramo de la película). De ahí que el film no termine de convencer: conjuga el romance juvenil con el drama de altos vuelos, la sencillez de ciertos momentos choca con el poder evocador de sus símbolos, y el paso de una película juvenil a un drama adulto no sucede de forma equilibrada (personalmente, resulta difícil de creer la historia adolescente cuando sus actores rondan los 25 años, pero en cambio convencen cuando sus personajes van ganando años y experiencias en la ficción). Título, en resumen, irregular, pero igualmente de gran valor: Inge escribe y describe los conflictos de cualquier historia de amor, y el público agradece que a medida que la trama abraza el desencanto también propone una descripción de la generación que sobrevivió a la Norteamérica de la Gran Depresión. Esplendor en la hierba, defectos aparte, es una gran epopeya romántica todavía vigente.


Reseña Mayra: Interesante drama basado en un poema de William Wordswhorth. Elia Kazan, en el argumento de Esplendor en la hierba, plasma su interpretación de dicho texto literario, el mismo que da vida a una trama en la que las complejidades del amor juvenil, los deseos de juventud y el dilema de anteponer lo que se debe a lo que se quiere son los principales ingredientes. Un film que nos lleva a conocer una historia de amor asfixiante, en primera instancia por parte de los padres hacia los jóvenes enamorados, quienes se hallan sobreprotegidos y manipulados por sus progenitores, lo que da paso a situaciones opresivas para la joven pareja, que no concibe la idea de separarse (uno amara más que el otro, haciéndole incluso más vulnerable en tiempos en los que los miedos y la incertidumbre del porvenir confunden y pueden llevar a colapsar). Pero son precisamente las líneas del poema de Wordswhorth las que definen y dan sentido al guion de Esplendor en la hierba, que resulta interesante y destacable por la interpretación de Wood. El final deja una moraleja interesante sobre el paso del tiempo, la juventud y el valor de los recuerdos, pero su punto más débil tal vez reside en volverse por momentos demasiado sosa (incluso para mi gusto) y melodramática.


VALORACIÓN DE LA CRÍTICA

Una de las obras maestras de Elia Kazan. Un film que examina los dolores del crecer, la sexualidad reprimida y la hipocresía social. Beatty firma un increíble debut y Wood logra su mejor interpretación. Emanuel Levy, EmanuelLevy.com

Film dramático e hiperbólico de contenido polémico para su tiempo: la represión sexual y la neurosis. Aunque forma parte de los umbrales de los 60 cinematográficos, su espíritu es de la década anterior: retrata los problemas de la juventud, como lo hicieron 'Picnic', 'Rebelde sin causa', 'Al este del Edén' y 'Peyton Place' entre otras. Tim Dirk, Filmsite

Un film alambicado que nunca consigue retratar los temas que intenta exponer: los inicios del capitalismo y la sexualidad. Revela la operística sensibilidad de su autor, pero también su incapacidad por trazar un argumento completamente riguroso. Redacción, Time Out

Se me ponen los pelos de punta recordando la despedida final de Natalie Wood y Warren Beatty. Carlos Boyero, El País

Nota Filmaffinity: 7'8 - Nota IMDB: 7'8 - Nota Rottentomatoes: 8'8


VALORACIÓN DEL FESTIVAL

Esplendor en la hierba es candidata a 4 PREMIOS DEL FESTIVAL:

Mejor actriz protagonista: NATALIE WOOD
Mejor actor secundario: PAT HINGLE
Mejor guion original: WILLIAM INGE
Mejor vestuario: ANNA HILL JOHNSTONE


PUNTUACIÓN DEL BLOG


1 comentario:

Luis Betrán dijo...

El periodo más rico y creativo de Kazan comienza en 1960 con la espléndida "Río salvaje" (Wild river) en la que combina una historia de amor digna de D.W. Griffith con la poesía natural de Robert Flaherty. La película transcurre en Tennessee, durante los años 30, coincidiendo con el famoso proyecto TVA de Roosevelt, y se centra en la relación entre el forastero Montgomery Clift (admirablemente contenido) y la anhelante y vulnerable Lee Remick, que ofrece la mejor interpretación femenina en una película de Kazan desde la Blanche Dubois de Vivien Leigh. A diferencia de sus películas anteriores, "Río salvaje" es serena, nada crispada y melancólica. El director demostraba en ella haber adquirido la etiqueta de maestro, una gran madurez y una autenticidad propia de los grandes artistas.

Sin embargo - y despues de "América, América" - Kazan confiesa que prefiere el suntuoso, barroco y extraordinario melodrama que es "Esplendor en la hierba" (Splendor in the grass, 1961), una película llena de ruido y de furia. Una obra de desatado romanticismo y de notable pesimismo sobre los Estados Unidos. Aqui nos situamos en el crack del 29 y el amor imposible entre una deliciosa Nathalie Wood, jovencita de clase media, y un inexpresivo Warren Beatty muchacho sumamente adinerado y dominado por su padre encarnado por Pat Hingle con sobrados medios. La crisis económica del 29 llevará a este autoritario caballero al suicidio, tras el abandono de Wood por parte de Beatty y la locura de la chica y el progresivo empobrecimiento del chico. Pero aquí el esquema tradicional se rompe. No habrá futuro para ellos y "aunque nada pueda devolvernos la hora del esplendor en la hierba y de la gloria de la flor, no lloraremos sino que lucharemos por todo aquello que nos fue arrebatado" (versos de Woodsworth que se recitan en la película). Con todos sus excesos, en las antípodas de "Rio salvaje", una bellísima obra.