domingo, 20 de mayo de 2012

Las nominaciones al Oscar de Suecia: Crítica de INFIERNO (Evil) y TIERRA DE ÁNGELES (Så Som I Himmelen)

EVIL (Infierno, Ondskan), de Michael Håfström (Suecia, 2003)

Evil conecta en muchos aspectos con La cinta blanca de Michael Haneke. En ambas se describen dos ambientes violentos, marcados por el machismo, el silencio, el sacrificio y el maltrato físico. Ambas son el retrato de una generación: Haneke se interesa por los niños que después fueron los verdugos del Holocausto nazi, y Hafström retrata los hijos de quienes sufrieron las dos grandes guerras. La cinta blanca obedecía solamente al estilo de su director, mientras que esta Evil viene a heredar toda una corriente de películas sobre institutos e instituciones represoras y la crónicas de aquellos enfants terribles que nunca quisieron acatar las normas. El protagonista de Evil tiene pues las características del Antoine de Los cuatrocientos golpes o el James Dean de Rebelde sin causa (de este último, además, cierta expresión chulesca, una estética, una belleza oscura), pero en la comparación Evil tiene todas las de perder. Ocurre lo mismo con La cinta blanca: ambas comparten frialdad, ambas son historias incómodas; Evil es una película con un ritmo muy logrado, con escenas impactantes, buenas interpretaciones... y es una lástima que no vaya más allá del caso que retrata para hablar de algo mayor. Como si al final al director le diese miedo generalizar y se quedara en lo individual (que no concreto). Incluso la aparición del abogado familiar en una suerte de ironía final demuestra el lado complaciente de una película que, en gran parte, es una descripción agobiante de la educación represora, más afín al fuste que a los libros, más preocupada en moralizar que en enseñar; de un campus en el que los estudiantes se retan a peleas en un improvisado cuadrilátero, en el que las novatadas son actos de extrema crueldad, en el que la amistad de dos compañeros de habitación ilumina un panorama desalentador. La primera y mejor película del sueco Mikael Hafström que, aun sin superar a su compañero Haneke, logró una justísima nominación al Oscar a la mejor película de habla no inglesa (de hecho, este blog la prefiere a la ganadora Las invasiones bárbaras). La letra con sangre entra, y tan diablo es quien pega como quien calla y no socorre al apaleado. Poco le ha faltado para ser redonda.


El diálogo: Un profesor compara el físico de los dos protagonistas ante toda la clase. La memoria de la defensa de una raza ária hiela la sangre.

La escena: El joven Erik se cuela en plena noche en el dormitorio de quienes no paran de atosigarlo y tira a su agresor un cubo lleno de heces.

Si te gusta esta crítica, vótala en Filmaffinity

Nota: 7


--------------------

 TIERRA DE ÁNGELES (Så Som I Himmelen, As It Is In Heaven), de Kay Pollak (Suecia, 2004)
Michael Nyqvist, antes de ser el Michael Blompvist de la Trilogía Millenium, dió vida a un director de orquestra con problemas de salud en Tierra de ángeles, los segundos chicos del coro que optaron al Oscar ese 2004 (los primeros, los franceses, aunque ganó la mucho mejor Mar Adentro). La película es una historia de segundas oportunidades y buenas intenciones, el eterno relato de persona que llega a un sitio desconocido y trastoca para bien la existencia de sus convecinos. Un film bastante obvio, lleno de frases sosainas, que aún así se deja ver por ese innegable, evidente pero irresistible buenrollismo que inspiran unos personajes que caen bien y a los que les deseamos todo lo mejor. Eso sí, 130 minutos es un metraje excesivo para explicarnos cómo un grupo de cantores aficionados logra tocar el cielo, pisar Austria y poner patas arriba la rígida moral de los más conservadores gracias a un músico de prestigio. Al menos ver esa Suecia rural tan nevada sirve de consuelo para refrescar el verano. Es extraño que en su día no se reivindicase porque gustará muchísimo a un público femenino de ciudad, aunque no sé hasta qué punto gustará a esa audiencia un final que puede resultar frío y cortante (en España llegó dos años más tarde de su estreno en Suecia). Para el resto, ofrece una tarde agradable de pequeñas revoluciones a ritmo de música clásica. ¡Tengan el klínex a mano por si acaso!



El diálogo: ¿Cómo saber si estás enamorado de alguien? Escuchen las palabras de Lena, una dependienta que ha quedado prendada del 'prota'.

La escena: La mujer del párroco del pueblo descubriendo las revistas porno que su marido esconde en la librería del comedor.

Si te gusta esta crítica, vótala en Filmaffinity

Nota: 6'5

1 comentario:

Sandra Sánchez dijo...

Ecelentes reseñas (como siempre Xavier), me quedo con Evil que me parece más interesante (de momento) aunque tendré las dos en cuenta.
;)