miércoles, 16 de mayo de 2012

Un cowboy, un indio, un caballo: Crítica de PÁNICO EN LA GRANJA (PANIQUE AU VILLAGE)

¿Se acuerdan de esos libros infantiles donde podías elegir el desarrollo de la historia yendo a una página u otra a riesgo de que la trama escogida fuese la más corta? ¿O de esos cuentos en los que uno se inventaba una frase, el siguiente seguía el hilo argumental con otra, y al final de la cadena poco o nada quedaba de la historia inicial? Pues así de naïf, de loca, de imprevisible, de entretenida y de surrealista es Pánico en la granja, un homenaje a los divertimentos de antaño y a los muñecos de plástico del far west. Los directores han dispuesto el set de rodaje como una sala de juegos y con la ayuda del ordenador han movido sus piezas allá donde su loca imaginación les ha llevado: de una clase de piano donde una yegua cumple las funciones de profesora hasta el centro de la tierra previa visita al Polo Norte. ¡Porque qué es el cine sino eso: una recreación infantil de algo inexistente frente la cámara! La idea inicial de poner un cowboy, un indio y un caballo viviendo en la misma casa ya promete despropósitos interesantes. Con Pánico en la granja no queda otra que dejarse llevar, esperando el efecto casero-retro visual siguiente sin buscarle tres pies al... caballo. Unos personajes que bien merecen una serie televisiva en tiempos de Pocoyo y Doras tridimensionales y ñoños. Los fans de la animación descubrirán cómo rentabilizar los cachivaques de la infancia, además de disfrutar de texturas visuales casi nuevas, como mínimo poco habituales. Tocará el corazoncito de muchos (los juguetes es lo que tienen: díganselo a Toy Story), otros la reivindicarán como título de culto, y al resto entre los que me incluyo proporcionará una hora y cuarto de rebelión y evasión en la granja. Una raruna rural que no deben perderse.


Nota: 6

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1 comentario:

Dialoguista dijo...

Sensacional peli!!! Yo le di un 10 por la osadía e imaginación. De buenas a primeras parecen solo muñequitos, pero hay todo un trabajo en todo, que esa "cotidianidad y simpleza" en las formas es buscada.
Ademas que va y va y re va, y de una cosa se salta a la otra con una agilidad genial!!!
Y si no me equivoco, si tienen una serie, o al menos varios cortometrajes, y es muy popular en su país :)))