martes, 21 de julio de 2009

SOY UN CYBORG 7 / 10


El cine de Park Chan-Wook es una oda a la diferencia. Sus personajes han vivido una dura experiencia, un episodio de metamorfosis que en cada película oclosiona con rabia y recreación, con una violencia vistosa, virtuosa y festiva, aunque repudiable, impactante y atroz. Desde el primer minuto, el personaje de la película reivindica su condición de cyborg en una sociedad llena de taras. Chan-Wook cree en la locura y entiende a sus enfermos: los seres de Old Boy y Sympathy for Lady Vengeance llevaban a cabo su venganza, y la frágil robot de Soy un cyborg consigue enamorarse, comer y salir victoriosa de su conflictiva naturaleza, de sus comportamientos esquizoides, de su trauma y nostalgia tras la marcha de su abuela. Si los protagonistas de Chan-Wook viven al límite, parece lógico que la estética de Soy un cyborg juegue también con polos opuestos y utilice una paleta de colores en continua mezcla. El director coreano encaja una marcianada adorable, la obra más liviana de su carrera, y quizás también la más ecléctica e inclasificable. Para bien o para mal, Soy un cyborg no puede ni debe ser contada; su visionado es toda una experiencia y, aunque Chan-Wook no apasione como antaño, sigue siendo un esteta de sumo interés.



De formas y fondo más ingenuo, Chan-Wook elabora un cuento complejo, una manera de reciclar su oficio y prepararse para otros proyectos menos graves, puede que anclados en el fantastique. De Soy un cyborg se disfruta su comedia negra, sus escenas de tiros y alocadas discusiones (es aquí donde nos encontramos al Chan-Wook de siempre), sus lagunas y digresiones, sus canciones y paisajes imposibles. No hay duda que el director fuerza la trama en demasía y confía sin atino en que el relato aguante el interés y la fuerza hasta el final. Soy un cyborg es inestable como un castillo de naipes, como las mentes que pueblan el sanatorio del film. Lady Vengeance también pisó uno y acabó como la mejor película de su director, incluso por encima de Old Boy. Los escenarios se repiten, la esencia es la misma pero algo cambía: Soy un cyborg es interesante sin brillar, aunque, como dice su título completo en inglés, 'that's OK'. Próxima parada: Thirst.

9 comentarios:

Jefe Dreyfus dijo...

una de esas películas que llevó demasiado tiempo queriendo ver.. la tengo pendiente, pero acabará cayendo!

muchas muchas gracias por el premio, amigo (inmerecido, por supuesto)

Roke Molina dijo...

Aunque yo le daría un 8, estoy totalmente de acuerdo con tu crítica. Ahora me preparo para ver más del director ;)

¡Saludos Xavier!

Crowley dijo...

Qué gran película. Enorme, como su director.
Saludos

elprimerhombre dijo...

Yo también la tengo para ver. Ahí la tengo en el ordenador desde hace no sé cuanto. Un saludo!

Dialoguista dijo...

A mi me intereso tu reseña, voy a intentar verla!!!!

Dialoguista dijo...

Ah, ya que estoy acá. No estaria mal un post con los estrenos de España de este año, como orientacion para el cinerank, y es que hay pelis que acá se estrenan antes y otras despues. Por ejemplo: "las manos" se estreno hace poco allá no? Algo muy raro sabiendo que es una coproduccion, deberian haberse estrenado el mismo año, pero ese ya es otro debate ;-)

redna dijo...

Que es mejor que old boy no coincido. Pero si coincido en que es una buena pelicula sin brillar como obra de arte.

Espero tu reseña de Still walking haber que tal jaja. Estare una gran parte de la tarde siguiendo el blog, poniendo todo al dia, y preparando una gran serie de post para cuando no este. Saludos.

Roke Molina dijo...

Xavier, veo que el día 30 empieza el Cineranking. Por esas fechas estaré yo en tierras británicas y poco podré acceder a internet. Y no quiero enviarte todavía mis votaciones ya que tengo poco visto. Así que me surge una duda: ¿no participar en el primero me impide participar en los siguientes?

Saludos Xavier ;)

Dialoguista dijo...

Me sumo a la pregunta de Roke