martes, 30 de abril de 2013

Crítica de KM. 0 (KILÓMETRO CERO), de Yolanda García Serrano y Juan Luis Iborra

Madrid en agosto
KM. 0, de Yolanda García Serrano y Juan Luis Iborra (España, 2000)
¿De qué va?: Diferentes personajes se dan cita a las seis de la tarde en el kilómetro cero madrileño, delante de la puerta del sol. Un apocado oficinista a punto de casarse ha contratado los servicios de una prostituta. Una mujer mayor de vida aburrida se encuentra con un gigoló. Un aspirante a director de cine recién llegado a la capital ha quedado con una amiga de su hermana. Un bailarín homosexual se encontrará con el chico con el que chatea. Una joven ultima los preparativos de su boda mientras su novio trabaja en su bar. De camino a una audición una actriz es atropellada por un productor teatral. Encuentros y desencuentros en un Madrid en plena canígula.
Palmarés: Nominada al premio Goya a la mejor canción: Kilómetro cero del cantautor Ismael Serrano. Premio Eurola en el Festival de Hamburgo. Proyectado en distintos festivales dedicados al cine de temática gay (New York, Pittsburgh, North Carolina) y galardonado con el premio del público en los certámenes de Miami, Philadelphia, Boulder y L.A. Outfest.
El dato: Aunque se estrenó durante las vacaciones de verano y pese a ser un film dirigido a un público joven, la película no logró colarse entre los títulos locales más taquilleros del año, un ranking que encabezaron La comunidad, Año Mariano y El arte de morir. Es el primer papel en cine de Víctor Ullate Jr., años más tarde conocido por ser uno de los profesores del talent show Fama, ¡a bailar! Es uno de los últimos papeles en la gran pantalla de Concha Velasco, el Goya de honor de este año. El film supuso la segunda colaboración del tándem García Serrano - Iborra tras Amor de hombre (1997). Posteriormente Iborra ha estado detrás de la dirección de series televisivas, las más notables Aquí no hay quien viva y La que se avecina.


Valoración: La comedia coral española tiene sus máximas expresiones en Berlanga y en la actualidad ha degenerado en algunas sitcoms televisivas de lo más vergonzosas. Km. 0 esquiva el ridículo, que ya es mucho. Aunque sus diálogos sean bastante esquemáticos, todo lo espontáneos o fluidos que puede llegar a ser un producto televisivo para adolescentes ligeramente inteligente. Con todo, los responsables del film no se reflejan en la alta comedia, mucho menos en Berlanga, sino en la comedia popular de menor envergadura que busca más la sonrisa que la risa. Tampoco cae en el vodevil descarado, porque aunque su premisa argumental se sustenta sobre una sucesión de líos y malentendidos (finalmente casi ningún personaje consigue encontrarse con la persona que buscaba) el guion evita lo zafio (a veces no lo fácil) y trabaja más la armonía del conjunto que la coherencia de sus partes (como una ensalada veraniega, vaya), sin cargar los mimbres de la ficción. Km. 0 es ágil y divertida, un título good feeling y veraniego, libertino y complaciente, ligeramente desordenado en su estructura y absolutamente positivo en su filosofía de base. Puede verse como una versión puber teñida de arco iris de las comedias sofisticadas francesas o de esos embrollos a la italiana que desde tiempos inmemoriables hasta El último beso o Manuale d'amore siguen interesando a cierto personal. Para pasar un buen rato con ciertas garantías de calidad.

Para los que solo conciben una comedia madrileña llena de tópicos y tacos.
Lo mejor: El equilibrio de sus historias cruzadas.
Lo peor: Algunos diálogos merecían una reescritura.

Nota: 6

No hay comentarios: