Cinoscar & Rarities: CRÍTICA SERIES

sábado, 3 de febrero de 2018

CRÍTICA SERIES | DARK

DARK

Alemania, 2017. 1 temporada de 10 episodios (Netflix). Género: Drama, Ciencia Ficción Duración: 60 min. por episodio Tráiler: Link Opening Tittle: Link Director: Baran bo Odar, Jantje Friese (creadores) y Baran bo Odar Guión: Jantje Friese, Baran bo Odar, Martin Behnke, Ronny Schalk, Marc O. Seng Reparto: Anna König, Roland Wolf, Louis Hofmann, Oliver Masucci, Jördis Triebel, Sebastian Rudolph, Mark Waschke, Karoline Eichhorn, Stephan Kampwirth, Anne Ratte-Polle, Helena Abay, Harald Effenberg, Sebastian Hülk, Deborah Kaufmann, Ella Lee, Andreas Pietschmann, Walter Kreye, Peter Benedict, Christian Steyer, Leopold Hornung, Tatja Seibt, Lisa Vicari, Hermann Beyer, Angela Winkler, Peter Schneider, Stephanie Amarell, Carlotta von Falkenhayn, Arnd Klawitter, Anatole Taubman, Luise Heyer, Lena Dörrie, Julika Jenkins, Michael Mendl, Gwendolyn Göbel, Lisa Kreuzer, Hannes Wegener.

Aunque a priori y por su premisa de un pueblo extraño donde ocurren ciertas desapariciones, Dark parecía una serie con historia y estilo heredado de Stranger Things, lo cierto es que tras el visionado de la serie nos encontramos con algo muy distinto. En primer lugar Dark es mucho más adulta, tiene una atmósfera llena de misterio y da poco un ningún espacio a la comedia o momentos graciosos, todo ese compañerismo y camaradería de Stranger Things no tienen lugar en esta serie, todo lo contrario sus personajes son demasiado ensimismados. La trama de Dark se desarrolla en un lúgubre pueblo de Alemania llamado Winden, las familias y los diversos personajes que viven allí son de una clase social acomodada, sin embargo son bastante fríos y taciturnos, algunos con ciertos problemas psicológicos un tanto perturbadores. Cada familia guarda sus propios secretos y conflictos y en cierto modo todos esos conflictos y sucesos extraños están conectados y son realmente el centro de toda la historia.

Dark empieza con un suicidio, una infidelidad y más tarde una desaparición, todo ese tono dramático y oscuro prepara el terreno para una historia sórdida y fría que, en segundo lugar pretende ahondar en el tema de viajes en el tiempo y paradojas temporales un tema que, salvando las distancias y al menos por su tema, sin duda recuerda a películas como Regreso al futuro o incluso en cuanto a complejidad a la reciente Your Name: también podríamos mencionar series como El ministerio del tiempo o la reciente Future Man, todas ellas enfocadas en el tema de viajes en el tiempo, realidades alternas y la intrigante pregunta de ¿hasta qué punto es posible cambiar el pasado para mejorar el futuro? una fantasía interesante que episodio a episodio hace que Dark se vuelva más compleja, por lo que el espectador debe estar atento a cada detalle para no perderse (sobre todo durante los últimos episodios de la temporada).

El reparto contiene un extenso abanico de personajes interpretados por actores poco conocidos (tal vez el nombre más destacado es el del joven actor Louis Hofmann a quien recientemente hemos visto en la nominada al Óscar Bajo la arena). Las interpretaciones son correctas y no destacaría a ningún personaje en particular. En resumen estamos ante una serie interesante con interpretaciones correctas y destacable ambientación y factura técnica, pero da la sensación de que la serie se queda a medias a la hora de aunar la ciencia ficción con el drama y desarrollar su historia (quizás un par de episodios más no le hubieran venido mal), esto, junto a lo ensimismado de sus personajes lastra un poco todo el relato. Dark no ha logrado apasionarme (cuestiones de gustos) pero sin duda es muy interesante y recomendable principalmente a quienes gustan del tema de viajes en el tiempo, sus paradojas, realidades alternas y de más. Netflix ha confirmado hace poco (lo que ya suponíamos) que la serie tendrá segunda temporada, así que estaremos atentos al estreno, porque tal y como quedaron las cosas, su segunda temporada promete mucho y podría ser mucho mejor que la primera.